La Regional Altiplano, creada en 1971 y conocida hasta 2012 como Regional La Paz, amplió su cobertura al altiplano orureño, adoptando su nombre actual. Esta región trabaja con la población indígena aymara, caracterizada por su fuerte influencia en la política nacional y su protagonismo destacado en las últimas décadas, debido a su ubicación geográfica, historia y tradición cultural.
Las comunidades rurales del altiplano mantienen una estrecha conexión con los centros urbanos, lo que permite a una parte significativa de la población transitar entre lo urbano y lo rural. Esta interacción genera nuevas oportunidades productivas y económicas para las familias rurales.
El CIPCA apoya el fortalecimiento del poder local en el ámbito municipal, promoviendo la articulación de organizaciones campesinas en distintos niveles. Este enfoque busca consolidar un proceso de desarrollo local participativo, corresponsable e inclusivo, así como la formulación e implementación de políticas públicas a nivel municipal y departamental en coordinación con los gobiernos autonómicos.
A más de 4.000 metros de altura, las comunidades del altiplano enfrentan condiciones agroecológicas desafiantes, agravadas por los efectos del cambio climático. En este contexto, CIPCA intensifica esfuerzos para identificar y desarrollar iniciativas económicas sostenibles. Las familias valoran la diversidad de sus actividades agrícolas y pecuarias, no solo por su rentabilidad, sino también por la capacidad de generar alimentos e ingresos combinados con oportunidades fuera de la comunidad.
A nivel de cobertura de la regional reflejamos la presencia y el trabajo de diversas organizaciones y actores en comunidades de los departamentos de La Paz y Oruro, enfocados en el desarrollo local y la participación de actores clave. A continuación, se detalla la información:
La Paz
San Andrés de Machaca: En este municipio, la organización SIMACO trabaja con 19 comunidades. Los actores involucrados incluyen autoridades originarias, autoridades sindicales (TK y BS), productores de base, asociaciones de productores, la comunidad educativa y organizaciones de jóvenes.
Calamarca: Aquí se registran 12 comunidades, aunque no se especifica la organización o actores involucrados.
Charazani: En este municipio, la Nación Kallawaya está presente en 2 comunidades, destacando su importancia cultural y ancestral.
Oruro
San Pedro de Totora: La organización Jach'a Karangas trabaja en 29 comunidades, aunque no se detallan los actores específicos.
Corque: También bajo la organización Jach'a Karangas, se registran 4 comunidades.
En total, se abarcan 5 municipios y 66 comunidades, donde participan autoridades originarias, sindicales, productores, asociaciones, comunidades educativas y organizaciones juveniles. Estos datos reflejan un esfuerzo conjunto por fortalecer el desarrollo local, la participación comunitaria y la preservación de las identidades culturales en las regiones de La Paz y Oruro.
Por una Bolivia democrática, equitativa e intercultural.