Agendas estratégicas priorizan el desarrollo productivo y económico
Giovana Montoya-CIPCA COCHABAMBA
Frente a los desastres que ha sufrido el sistema agropecuario del departamento de Cochabamba, como efecto del Cambio Climático, la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Cochabamba y la Federación Departamental de Mujeres Campesinas Originarias Indígenas de Cochabamba “BS”, junto a las dirigencias de las 16 Centrales Provinciales, autoridades Departamentales y Nacionales; han efectivizado el primer Ampliado Extraordinario Departamental de Desarrollo Productivo y Desastres Naturales Gestión 2022.
Los Ministerios vinculados al ámbito del desarrollo agropecuario y de los recursos naturales, producto de las interpelaciones de las organizaciones sociales, reflexionaron sobre la necesidad de asumir acciones y estrategias vinculadas a contribuir en la reducción de desastres naturales y fortalecer la agricultura familiar custodia de la seguridad alimentaria nacional.
Las resoluciones de dicho evento, apuntan a establecer como paradigma filosófico el vivir bien y en armonía con la Madre Tierra. De este modo, inducen en a) la implementación de acciones de prevención, contención y atención de desastres naturales y ambientales; b) implementación y operativización de los planes de contingencia, emergencia y de manejo integral de cuencas, tanto a nivel a nivel municipal, como departamental; c) exigir al Estado central la priorización de Programas de Desarrollo Productivo que respondan a los potenciales productivos de los diferentes pisos ecológicos para reactivar la economía de las familias campesinas, inscritos en los PTDI.
Con la misma vehemencia, las resoluciones del magno ampliado establecen, e) priorizar el consumo y comercialización de la producción local; f) asumir acciones de control y lucha del contrabando agrícola; g) valoración y reconocimiento de la producción agropecuaria estableciendo mecanismos y control de los precios y peso justos; h) desburocratizar el acceso a créditos y que los procesos se adecuen a las posibilidades y condiciones del pequeño productor; i) asumir e impulsar emprendimientos económicos comunitarios con mercados potenciales relacionados a la producción ecológica y rutas de turismo cultural; y finalmente j) impulsar la profesionalización de jóvenes en áreas de desarrollo productivo.
Considerando que la agricultura familiar provee el 98,5 % de los alimentos de la canasta básica alimentaria, los municipios rurales productores de alimentos son los valles cochabambinos, paceños y, en menor medida, cruceños quienes garantizan la seguridad alimentaria nacional; por tanto, es vital su apoyo, protección y fortalecimiento desde el ámbito nacional y sub nacional. Cabe resaltar que las agendas de las organizaciones sociales también apuestan y están priorizando acciones que respondan a las necesidades, demandas y problemáticas emergentes vinculadas al sector productivo.
Por una Bolivia democrática, equitativa e intercultural.