CIPCA / 24 de agosto de 2016.- Del 3 al 16 de agosto de 2016 se realizó un intercambio de experiencias denominado “Hacia el buen vivir de los pueblos en su territorio” en la ciudad de Lima-Cusco-Perú en el marco del proyecto de CCFD – Terre Solidaire Francia (Comité Católico Contra el Hambre y por el Desarrollo - Tierra Solidaria), en el que participaron representantes de instituciones y organizaciones sociales de Perú, Bolivia y Francia. En este evento se compartieron avances, dificultades y retos en la implementación de propuestas alternativas de desarrollo económico productivo en favor de las organizaciones indígenas y campesinas de ambos países frente al extractivismo y la agroindustria.
Las mujeres y hombres participantes del Perú contaron cómo en comunidades campesinas de la Región de Apurimac se viene desarrollando una agricultura familiar agroecológica (horticultura, ganadería ovina y cultivo de papa), misma que está siendo amenazada por la actividad minera “Las Bambas”, las concesiones mineras en el Perú representan un 20.23% del territorio. Durante el evento se pudo visitar el Distrito y Provincia de Anta comunidad campesina de Chacán donde se viene desarrollando con éxito el Turismo Rural Comunitario o turismo vivencial, trabajo que viene realizando el Centro Bartolomé de las Casas – CBC con la asociación de mujeres “Ñusta Encantada” ambos lugares mencionados se encuentran entre 3.650 a 3.800 msnm.
Las y los representantes de Perú, Bolivia y Francia manifestaron que los trabajos realizados por las instituciones CBC, Cooper Acción - Acción Solidaria para el Desarrollo, Fomento de la Vida-FOVIDA (Perú) y el Centro de Investigación y Promoción del Campesinado –CIPCA (Bolivia) vienen desarrollando propuestas económicas productivas que son base para la consolidación del Vivir Bien o Sumaj Kawsay. En el caso de Bolivia, CIPCA presentó la Propuesta Económica Productiva (PEP) como una estrategia de acción concertada con campesinos indígenas y sus organizaciones, orientada a su fortalecimiento económico de manera que contribuya al ejercicio de sus otros roles en la sociedad boliviana, al desarrollo rural sostenible y al desarrollo del país.
Se debatió y analizó sobre el hecho de que las políticas públicas nacionales de los países están orientadas a impulsar el modelo de desarrollo rural agroindustrial y extractivista, con destino a los mercados externos y muy poco a fomentar la agricultura familiar indígena y campesina. Los avances conseguidos en cuanto a modelos de producción más sostenibles son resultado del trabajo y esfuerzo de asociaciones de productores indígenas y campesinos, de las instituciones de apoyo de algunos gobiernos locales.
De las visitas realizadas a familias campesinas productoras del Perú, se lograron obtener 2 conclusiones y aprendizajes: Primero, que las mujeres son las protagonistas principales del Turismo Rural Comunitario con enfoque territorial agroecológico que les permite generar recursos suficientes para mantener a sus familias. No solamente participan en la producción de alimentos sino también en la comercialización de sus productos en mercados, la crianza de cuyes, elaboración de medicinas tradicionales, elaboración de tejidos y artesanías donde es el turista quién comparte con la familia en sus diferentes actividades diarias; segundo, las acciones realizadas frente a los impactos ambientales que sufren varias comunidades de la Región, promueven el conocimiento y el ejercicio de los derechos sociales, ambientales, políticos, culturales y económicos; así como la gestión sostenible del territorio con enfoques de género e interculturalidad. De esta manera poder construir alternativas de desarrollo. Por ejemplo las comunidades se encuentran en un proceso de reordenamiento territorial, gestión de los recursos hídricos, gestión ambiental como alternativas al extractivismo.
Por una Bolivia democrática, equitativa e intercultural.