CIPCA / 21 de diciembre de 2018.- Simeón Guaji Guaji, con 64 años es el actual corregidor de la comunidad Tsimane Jojori. Guaji es mojeño trinitario, tuvo seis hijos, y ya hace 10 años que es Corregidor de esta comunidad, a solicitud de los mismo comunarios.
El corregidor vivió durante muchos años en el sector del norte de La Paz, siempre en áreas rurales, pues dice que no le gustan las ciudades, y que prefiere vivir en el campo. Explicó que llegó a ser corregidor por invitación expresa de los miembros de la comunidad.
“Me vine invitado por los hermanos, eran explotados de otros hermanos, entonces han visto que no podían seguir siendo explotados y por eso llegué aquí con ellos, me dicen que venga aquí donde era mi comunidad, nos vinimos y ellos me pusieron de corregidor”, aseguró Guaji.
Grandes necesidades
Guaji aclaró que las necesidades de la comunidad son muchas, y varias de ellas aún no han sido solucionadas.
“Empezamos a ir seguido a San Ignacio a buscar solucionar las necesidades de esta comunidad, y así exigimos primero para la educación, de ahí aprovechamos y pedimos una motosierra para la comunidad, logramos los dos objetivos que estábamos haciendo, y así es que me quedé con ellos”, declaró el corregidor.
“Nos pusimos a trabajar, aquí no hay ningún adelanto por tema del acceso, no se puede trabajar en grandes parcelas para sacar afuera lo que hace, entonces por la necesidad sembramos para el sustento de cada día, para los niños más que todo”, completó.
Guaji logró que las 14 familias que componen la comunidad cuenten con una pequeña escuela para que los niños y niñas de la comunidad puedan asistir.
“Tenemos una escuelita a la que asisten 10 niños, hay más pero mala suerte nosotros como padres a veces, diré la verdad creo que es importante mencionar no somos responsables de nuestros hijos, hay padres que no mandamos a nuestros hijos para bien de ellos, que no se queden como nosotros analfabetos”, declaró asegurando que hay niños que no asisten a la escuela por dejadez de los padres.
Una esperanza puesta en la autonomía
Guaji aseguró que las grandes esperanzas de la población están puestas en la autonomía, pues sienten que el municipio los abandonó y nunca atendió sus demandas.
“No recibimos nada del municipio, ya le decía ese es el motivo por el cual hay pocas buenas para esta comunidad, el municipio no nos ha ayudado, pese yo como corregidor de esta comunidad he ido para hacer varias solicitudes para las necesidades de esta comunidad, un pozo de agua, las calaminas para eso, no se está cumpliendo, por eso vivimos como nos vio”, remarcó con molestia.
“Pero si logramos ser autónomos, podremos mejorar, podremos vivir bien, podremos prosperar”, completó visiblemente esperanzado el corregidor.
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